domingo, 24 de enero de 2010

IKIGAMI


Acabo de estrenarme en el mundo del manga.
Hace un par de meses me topé con el 1º tomo de "Ikigami", de Motoro Mase. La verdad es que me llamó la atención nada más leer la sinopsis, y aunque acababa de comprar otro ejemplar más conocido ("El almanaque de mi padre") para llevar a acabo mi 1ª incursión en este género literario, no pude resistir la tentación de aparcar momentáneamente el otro y cederle el puesto al recién llegado.

Se trata de un manga para adultos -seinen manga-, publicado en España por Panini. Actualmente es una colección abierta que continúa publicándose en Japón. Incluso existe versión cinematográfica.

En un principio me pareció una apuesta arriesgada (¿no deberías comenzar con algo más clásico? ¿y si no te gusta?) pero me apetecía tanto que mis dudas se disiparon.


Cada tomo consta de 2 episodios estructurados en 3 partes como en un guión teatral (introducción, desarrollo, desenlace).

Me encanta que se haya editado al estilo japonés (con la lectura de atrás hacia delante y de derecha a izquierda); me fastidia el empeño de algunas editoriales en "occidentalizar" estos cómics porque desde mi punto de vista pierden parte de su encanto (será que me he vuelto muy purista). Lo que menos me gusta es que el autor hace hincapié al inicio de cada tomo en "recordar" el hilo argumental (para eso están las sinopsis y si los lees en orden resulta innecesario); aunque tiene la deferencia de narrarlo de modo distinto cada vez y ocupando tan sólo un par de páginas.

La trama es bastante original y sirve de excusa para hilvanar las historias independientes, en las que se abordan temas de interés social que invitan a la reflexión y no están exentas de realismo ni dureza en algunos casos.

Cuenta cómo hace años se promulgó en Japón la "Ley para el Sostenimiento de la Prosperidad Estatal" con el fin de controlar a la sociedad, reduciendo la delincuencia y estimulando a los ciudadanos para que se esfuercen en llevar una vida ejemplar, sacando el máximo provecho a su existencia. La herramienta de la que se sirven es una inyección que reciben todos los alumnos en la escuela primaria: sólo una de cada mil contiene una nanocápsula que les provocará la muerte entre los 18 y 24 años. Como nadie sabe si es portador, se supone que se esforzarán en sacar provecho de sus vidas. 24 horas antes de su muerte, reciben el "comunicado de muerte"= ikigami, entregado en mano por un mesajero, dándoles así la oportunidad de decidir cómo abandonar este mundo y cómo despedirse de sus seres queridos. A cambio las familias reciben una compensación económica (siempre y cuando el sujeto no haya delinquido nunca, ya que en tal caso incluso serán multados por su comportamiento). Contemplaremos las vidas de esos sujetos a través de los ojos de Fujimoto (uno de los mensajeros), que pronto se empezará a cuestionar la legitimidad de tan controvertida ley ("es injusto que mueran, cuando hay personas que lo merecen más").

Me gusta la variedad que ofrece Motoro Mase en sus dibujos, alternando sencillas viñetas (sombras, en algunos casos) con otras realmente elaboradas, así como la expresividad con que dota a sus personajes en los planos "cortos". Tiene mucha fuerza.

Emplea interesantes perspectivas (enfoques laterales, desde ángulos superiores,...) que aportan dinamismo, recursos que facilitan la comprensión (como el espacio entre viñetas en degradé de blanco y negro para los flashbacks) y otros recursos estilísticos que enfatizan los gestos y sentimientos del personaje (onomatopeyas visuales, sombreados,....).

Admiro su dominio del lápiz.


Como en esta viñeta en la que reproduce una imagen televisiva.

Un tema original y una buena técnica que me tienen enganchada por completo.
Tendré que acercarme a buscar el 4º tomo....

jueves, 21 de enero de 2010

DE GLOBOS Y PELOS

Es estupendo que Toni Collett haya conseguido el globo a la Mejor Actriz de Serie de TV por su papel en "Estados Unidos de Tara"; he visto algún capítulo y su camaleónica interpretación bien se merecía el premio. Es una actriz que siempre me gustó.

No me sorprende que la reina de la noche fuese "Avatar"; la asombrosa maquinaria publicitaria que la envuelve lo hacía presagiar. ¿Merecido?; no puedo opinar porque todavía no la he visto.

Me parece una lástima que la alfombra roja sea menos arriesgada que en la noche de los Oscars; la des-peinada Sandra Bullock y las sosas Julia Roberts y Meryl Streep (entre muchas otras) ratifican mi opinión de que la alfombra de los Oscar es insuperable. Tocará post, por supuesto.

Pero por encima de todo me encanta que Christoph Waltz se haya llevado el gato al agua.
Porque me encanta el papelón que desempeña en "Malditos Bastardos", y ya que la película ha pasado sin pena ni gloria por el festival, al menos que él se lleve el globo a casa. Porque se lo merece.


Pero lo que jamás pensé que vería en un festival de esta categoría eran las exóticas piernas de la ganadora a la Mejor Actriz de Reparto: Mo'nique.

Vale que la alfombra esté pelín mojada por la lluvia, pero analizando la situación bien vale que el vestido se arruine antes que dejar escapar lo que el refajo esconde con tanto acierto.


Lástima que el premio no viniera acompañado de un kit de Gillette.

Como dice la canción: "antes muerta que sencilla". Por favor.

Fotografías: life.com

domingo, 17 de enero de 2010

GRAN VIA - EDIFICIO METROPOLIS

Este emblemático edificio, aunque técnicamente no se encuentra en la Gran Vía sino en la C/Alcalá 39, marca sin embargo el punto de arranque de la primera.

En la confluencia de ambas calles anteriormente se alzaba la conocida como "Casa del ataud", denominada así por la forma estrecha y alargada del edificio:


El proyecto fue ganado por los arquitectos Jules y Raymond Fevrier (cuya influencia francesa se hace evidente en la ornamentación y en el estilo del edificio) quienes comenzaron las obras en 1907 y siendo continuadas por el español Luis Esteve. El coste total (solar incluído) ascendió a cerca de 4 millones de pesetas (24.000€).

El edificio constituye la antigua sede de La Unión y El Fénix. "El Fénix Español, Compañía de Seguros Reunidos" fue fundada en 1864 y absorbido en 1879 por otra compañía del sector: "La Unión", pasando a denominarse desde entonces "La Unión y el Fénix Español" y derivando en lo que hoy conocemos como Fénix Directo (tras pasar a formar parte del grupo alemán Allianz). En fin, vivimos en un mundo de fusiones infinitas.

La firma decide comprar un edificio en cada población importante coronándolos con el emblema de la compañía: un joven (Ganímedes) sentado sobre un Ave Fénix (una imagen muy simbólica, sin duda, para una compañía de seguros). La mayoría han perdurado hasta nuestros días.


Los riesgos que cubría el seguro eran: "inundación, incendio, muerte, motín y destrucción de cualquier especie" y acostumbraban a colocar una placa en el dintel de cada vivienda asegurada.
El de la C/Alcalá es el edificio más representativo en el país, y fue sede de la compañía desde 1907 hasta 1910.
De inspiración francesa (estilo segundo imperio), destaca por su cúpula de pizarra (con relieves cubiertos por más de 30.000 panes de oro de 24 kilates) y su rotonda con columnas corintias, así como la multitud de esculturas de artistas de la época (entre ellos, Mariano Benlliure) y que representan la agricultura, comercio, minería e industria. Fue uno de los primeros edificios de Madrid en utilizar hormigón armado.



En 1975 cambia de manos y es ocupado por la compañía "Metrópolis", que sustituye la estatua por una victoria alada (obra de Federico Coullant Valera) y el Ave cambió su ubicación a los jardines de la nueva sede de la compañía en el Paseo de la Castellana, 33. Por unos instantes, aquel 11 de octubre de 1977, la Victoria y el Fénix se saludan en la acera, esperando el traslado a sus nuevas ubicaciones.

Como anécdota, destacar que enfrente del edificio se instaló el primer semáforo de España, allá por 1926, editando el Ayuntamiento unas instrucciones para dar a conocer a los conductores el código de colores.

¿Qué esconde su cúpula hoy, 100 años después? No hay nada de romanticismo ni misterio en el trastero mejor ubicado de todo Madrid.
Hoy, cerca de 200 focos resaltan lo mejor del Metrópolis en las noches de la Gran Vía.






Fotografías: madridpedia, viendomadrid.blogspot.com

lunes, 11 de enero de 2010

SE LLEVAN LAS MELENAS LARGAS

Me confieso una fanática del diseño en todas sus vertientes (arquitectura, mobiliario, ropa, accesorios,...) y aunque hay propuestas que ni loca compraría aunque mi cuenta bancaria nadara en la abundancia, no deja de admirarme y sorprenderme la creatividad de algunos diseñadores.

Como dijo Karl Lagerfeld: "Todo me inspira; sólo hay una norma: abre los ojos".

Desde mi rol de mera espectadora, ésta es la última versión que me ha dejado con la boca abierta: los sorprendentes diseños de Dejana Kabiljo y del estudio Baron&Baron.







¿No sentís un poquito de grima?









miércoles, 6 de enero de 2010

4 ABRIL DE 1910: NACE LA GRAN VIA MADRILEÑA

Esta primavera se celebrará el centenario del nacimiento de la Gran Via madrileña, y éste será el primero de una serie de posts dedicados a una de las principales arterias de la ciudad.
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4 abril 1910: en un día soleado y frío (en consonancia con los -5ºC que los termómetros registraron los días previos), Alfonso XIII inaugura las obras de construcción de la Gran Via en compañía de su esposa la reina Victoria Eugenia, el alcalde Francos Rodriguez (médico y periodista) y el presidente del gobierno José Canalejas.

La familia real llegaba al evento poco antes de las once en varios automóviles Hispano Suiza. Como refleja la crónica del diario ABC, "el Rey vestía uniforme de capitán general, con largo capote y casco y S.M. a Reina Doña Victoria, traje de terciopelo negro, boa de armiño y sombrero azul adornado con plumas negras".
Cerca de mediodía y ayudado por una piqueta de plata, el Rey, encaramado sobre la plataforma dispuesta a tal efecto, "picó" sobre la primera víctima de la reforma: la casa del párroco de la iglesia de San José (conocida como la Casa del Cura, un inmueble parroquial de 2 plantas adosado al templo), al son del pasodoble Dos de Mayo, dirigido por Ricardo Villa e interpretado por la banda municipal en medio de los aplausos y el clamor popular. Inmediatamente, los obreros se dispusieron a comenzar el levantamiento de tejas. El Rey les ofreció "5 duros de propina", cantidad nada despreciable en la época.
Comenzaban unas obras que se prolongarían durante más de 20 años.


(En la foto superior, el rey firmando el inicio de las obras).

La finalidad era unir los barrios de Salamanca y Argüelles, en creciente pujanza, así como descongestionar la Puerta del Sol y sanear el centro derribando inmuebles en mal estado e insalubres y ya de paso mejorar el tráfico en la zona.

El proyecto empezó a tomar forma hacia 1897, año en que los arquitectos José Lopez Salaberry y Francisco Octavio Palacios redactan el proyecto, que no será aceptado oficialmente hasta el 2 de julio de 1901 (aunque ya en 1886 se presentó otro proyecto del arquitecto Carlos Velasco).

Muchos años transcurrieron hasta completar la expropiación de los solares en su totalidad, ayudándose para ello de la "Ley para Saneamiento, Reforma y Ensanche Interior" (334 edificios expropiados repartidos a lo largo de 30 manzanas). El principal escollo lo planteaba la inexistencia de una normativa adecuada que garantizara un pago justo de los inmuebles, al tiempo que evitara cualquier problema jurídico derivado de las discrepancias que el titánico proyecto pudiera desencadenar. Así, el Ayuntamiento hubo de esperar varios años hasta que se promulgó la citada Ley y se sentaron unas bases legales sólidas. Asimismo, no fue fácil obtener financiación para expropiar los terrenos y acometer las obras.

Una larga espera que se dilató más de 10 años.

Se demolieron gran cantidad de edificios y se transformó por completo la fisonomía de las calles, construyendo 32 manzanas nuevas sobre las 312 casas derribadas. Se niveló el terreno y se desenlosaron más de 8.000 metros de aceras, renovando cañerías de agua y gas y creando más de 2.000 metros de alcantarillado. La avenida estrenó 219 farolas de gas y cerca de 60 lámparas con candelabros.

En el camino quedaron calles como la de San Miguel, del Perro o de la Nao, que ahora forman parte del recuerdo histórico junto con el Convento de Nuestra Señora de la Presentación o parte de la Iglesia de San José.

El 1º tramo o Avenida B (Alcalá-Red de San Luis) se acometió entre 1910-1916 y recibió el nombre de Conde de Peñalver (en homenaje al alcalde Nicolás Peñalver Zamora que firmó el inicio de las obras años atrás; hoy ese nombre pertenece a otra calle de la ciudad, en el Barrio de Salamanca).

El 2º tramo o Bulevar (Red de S. Luis-Callao) se acometió entre 1917-1921 y se llamó Avenida de Pi y Margall en recuerdo al Presidente de la 1ª República, en 1873). En un principio se ideó como un boulevard arbolado.

El 3º tramo o Avenida A (Callao-Pza. de España) se realizó entre 1922-1931 y se le asignó el nombre de Eduardo Dato (presidente del Gobierno en 1913 y 1920 y alcalde de Madrid en 1907), que hoy en día ostenta otra calle de la ciudad.

(En la fotografía superior de 1928 se reflejan las obras de este 3º tramo, con la construcción del Palacio de la Prensa a la derecha, el solar que más tarde ocuparía el Edificio Capitol en el centro, y a la izquierda el edificio del Cine Callao, ya finalizado, y en cuya terraza se aprecia la pantalla del cine de verano).

Tres meses antes del comienzo de la Guerra Civil la Avenida cambió su nombre por los de Avenida de la CNT, Av. de Rusia (corregido poco después al de Unión Soviética) y Av. de México, agradeciendo así el apoyo recibido del extranjero.

Aunque, como siempre, la ciudadanía tendría la última palabra, inventado apodos como la Avenida de los Obuses o la Avenida del Quince y Medio (haciendo referencia al calibre de los proyectiles arrojados por el bando franquista).


La parte que más daños sufrió fue la cercana a la Plaza de España, por estar más próxima al campo de combate de la Ciudad Universitaria.

Sus estaciones de Metro (como muchas otras en diferentes zonas de la ciudad) sirvieron de refugio antiaéreo a la población:

Tras la Guerra Civil pasó a llamarse Avenida de Jose Antonio (en homenaje a Jose Antonio Primo de Rivera) y no fue hasta 1981 cuando recibió el nombre por el que hoy la conocemos, el de Gran Vía, asignado por el entonces alcalde Enrique Tierno Galván (si bien era el nombre concedido por el pueblo llano incluso antes de iniciarse las obras, no fue oficial hasta ese año).

En resumen, 25 metros de ancho y 1316 metros de largo cargados de historia.
fotografias: elmundo.es

sábado, 2 de enero de 2010

AQUELLOS AÑOS NUEVOS

Pues la verdad, no hemos cambiado tanto...


Resaca de año nuevo en Grand Central Station, NY, 1-10-1940


Celebración de año nuevo en Londres, 1-01-1955



Año Nuevo en Berlín, 31-12-1989



Fotografías: Life.com