Lo que yo no sabía es que tiene su propio museo en los EEUU (fundado en 1969 en Stockbridge, Massachusettts, donde vivió durante sus últimos 25 años, además de otro museo menor ubicado en Vermont) y que en su última etapa profesional también adoptó la fotografía como medio de expresión.
Inicialmente contaba con modelos que posaban para sus trabajos, aunque pronto comprendió las posibilidades que le ofrecía la fotografía. Son precisamente sus portadas para la conocida revista de actualidad Saturday Evening Post (su primer trabajo para ellos data de 1916: un total de 322 cubiertas a lo largo de 47 años) las que le dieron renombre y lo convirtieron en el ilustrador más popular de su época, así como sus anuncios (para Coca-Cola, Kellogg's, dentífricos....). Se suceden las ilustraciones de libros, los calendarios para boy scouts, retratos, la biografía ilustrada de Louisse May Alcott...
En la década de los 20-30 se centró básicamente en escenas infantiles, debido a su papel como director artístico de la revista "Boys' Life", especializándose en trabajos para revistas infantiles. En los 30-40 evolucionó hacia otras temáticas y es el que mejor supo plasmar el modo de vida norteamericano a través de sus escenas costumbristas.
Entre 1941-1946, recibió el encargo del Post de realizar una serie de portadas para levantar la moral del país en las que relataba, a lo largo de 11 ilustraciones, las aventuras de un soldado raso imaginario (Willie Gillis) durante su periplo tras enrolarse en el ejército y hasta su regreso a casa, sano y salvo. Si bien fue tachado de "blando" y "azucarado" por sus detractores, hay que reconocer que también incluyó la crítica social, especialmente en los 60-70, a cuenta de los cambios políticos y la creciente integración de culturas, como demuestra en "El problema con el que convivimos todos", donde muestra a una niña de raza negra que es escoltada a la escuela:
De lo que no cabe duda es de la exaltación del pueblo americano a través de sus dibujos, entre los que destaca su serie "Libertad" (inspirado por el discurso de Roosvelt sobre las 4 libertades): "Freedom from want" (libertad de la necesidad: representa a una familia reunida en torno a la mesa el día de Acción de Gracias), "Freedom of speech"(libertad de expresión), "Freedom from fear" (libertad del miedo) y "Freedom to worship" (libertad de culto), considerada ésta última como su obra maestra. El Gobierno imprimió millones de carteles y los lienzos viajaron en 1943 en una gira por 16 ciudades en compañía de su autor, con el fin de exaltar el orgullo patrio y bélico.
En esta página se pueden ver todas las portadas que creó para el Saturday Evening Post.