Es una de las instituciones educativas más antiguas de Madrid, ya que sus orígenes se remontan a los siglos XV-XVI. Auspiciado por el Ayuntamiento, este centro de acogida albergaba niños huérfanos menores de 15 años. La "Casa de los Niños Doctrinos de San Ildefonso" (como era conocida en la época) destacó pronto por la calidad de su formación académica; ya en el s. XIX impartían asignaturas tan poco comunes como solfeo, taquigrafía, mecanografía y dibujo.
Acogió en sus primeros años a 40 niños madrileños, de legítimo matrimonio y huérfanos al menos de padre. Las niñas no ingresarían en el centro hasta 1984.
Para contribuir a la manutención eran a menudo contratados para cantar en entierros, procesiones y otras ceremonias religiosas.
Para los más aplicados se solía reservar algún puesto en la administración municipal al terminar sus estudios.
Pronto su camino se cruzó con el de los sorteos de lotería; colaboraban en ellos a lo largo de todo el año, aunque el extraordinario de Navidad ocupaba mayor protagonismo.
El 1º niño en cantar un número premiado fue Diego Lopez, el 9 de Marzo de 1771. Aquel año, la Hacienda pública gratificó al colegio con 500 reales en agradecimiento a la colaboración de los niños.
De su primitiva ubicación, en el nº 3 de la Carrera de San Francisco, pasó a la C/ Alfonso VI en 1884 en busca de un espacio mayor, ocupando unas casas que fueron propiedad del marqués de Benalúa. Su financiación corría a cargo del Ayuntamiento y donaciones particulares; actualmente está subvencionado por el Org. Nal. de Loterías y Apuestas del Estado en colaboración con el Ayuntamiento.
Es a partir de 1973 cuando comienza la admisión de alumnos externos dando pie en 1986 a la escisión del centro en 2 áreas: el centro de educación primaria y secundaria y por otro lado la Residencia-Internado, que además de huérfanos también acoge a menores de familias con problemas sociales y económicos que regresan con sus familias durante los fines de semana y vacaciones.
Son los niños de la Residencia-Internado exclusivamente los que participan en los sorteos de Lotería. Son seleccionados 36 niños y niñas, que practican 1 hora diaria durante los 2 meses previos, aprendiendo a entonar, modular la voz y coordinar la extracción de las bolas. Sólo cantan niños entre 8 y 11 años para evitar las confusiones de los más pequeños y los cambios de voz de los mayores.
El día 18 de diciembre tiene lugar el ensayo general.
Mañana estarán en pie a las 6 de la mañana y ya uniformados, acudirán a desayunar todos juntos a una cafetería junto al Salón de Sorteos, aplacando los nervios para enfrentarse a las pantallas de televisión.
Otra figura madrileña ligada a esta fecha es la de la loteras de la Puerta del Sol, que alínean sus sillas de tijera haciendo frente a las inclamencias del tiempo para repartir la suerte entre los viandantes.
Lotera en Callao, 1942:
11 comentarios:
A mi me encantaba tambien el calvo navideño y su música. Y tambien echo de menos no tener cole el día de la lotería. En mi casa siempre fue un día como muy especial: empezaban las vacaciones y en concreto mi madre es muy "de la lotería".
Y hay que ver lo que hacen madrugar a los pobres de los niños cantores...a ver si nos dan un pellizquito.
Besos!!
He estado porfiando en el flenchiburg sobre eso, estoy segura de que es el primer 22 que trabajo ¡vaya rollo!
Menkantaba el calvo también.
Este año, como mi marido no estaba nuestros gastos en lotería se han reducido considerablemente ¡menos mal!
Bssssssss
Cloti
Me ha encantado tu entrada Anele, es muy bonita... Yo también toy un poquito rabiadilla, pues es el primer año que me toca trabajar... y no puedo disfrutarlo por la radio ni la tele...
Y a mí también me encantaba el calvo de la lotería... es una pena que no sigan haciendo esos anuncios,pues eran preciosos,no?
un post muy interesante, anele. mucha gente sólo conoce el colegio de san ildefonso por lo de que sus niños cantan en el sorteo de la lotería. está muy bien conocer la historia que hay detrás.
eso sí, vaya nervios deben de pasar los pobres cuando estén siendo filmados! además, por mucho que ensayen, tienen que cantar el número que están leyendo en ese momento, sin equivocarse... en ese sentido, cantar los números es más complicado que cantar los premios, que están predeterminados.
Ana, en mi casa lo primero que hacíamos era encender la tele y dejarla toda la mañana mientras ibamos haciendo las faenas de la casa. A ratos nos sentabamos, sobretodo al principio, cuando sacan a gente que ha ido al Salón y cuentan cosas muy curiosas del sorteo.
Cloti, Aurin: también me lo voy a perder. Y pondría la radio pero com mi jefa es una sosa y no le gusta la lotería, no nos deja porque la radio el elevanta dolor de cabeza.
Chema: me alegro de que te haya gustado. Tiene que ser super estresante saber que media España está pendiente de tí.
Menuda historia la del colegio, no tenia ni idea, como siempre una entrada preciosa y siiiii yo tambien trabajo (pero como estoy solita me pongo la radio, jejeje) y el calvo no sale mas porque me lo he quedao yo... juas juas juas
BSTS
Mi recuerdo es de estupefacción. MIentras la envidia me corroía por ver a esos niños tan repeinados en la tele, mi madre musitaba "¿Qué pena! ¡Pobrecitos huérfanos!
¿Cómo "pobrecitos" si estaban en la tele con los del Un, dos TRes...??
Y este año me toca a mí....
Muy bueno el blog, a mi me gustava mas cuando decian "PESETAS"
Peasssso post, niña. No sabia ni la cuarta parte de las cosas que nos cuentas...
Pues no sabía toda la historia. Muy interesante. Cada día se aprende algo, no?
Yo lo que quiero es que me toque la lotería ya de una vez!! Pero este año tampoco ha habido suerte!
Interesante la historia del colegio. Recuerdo el primer año que hubo niñas, jejeje. También recuerdo que el día 22 era el último de clase antes de las vacaciones y siempre alguien llevaba una radio y escuchabamos el sorteo en el cole. Ahora lo pongo un ratillo pero enseguida me cansa la musiquilla.
Y sí, se echa de menos al calvo
Publicar un comentario