lunes, 16 de agosto de 2010

SER O NO SER

Hace unos meses tuve la ocasión de asistir a la representación teatral de esta comedia del Sr. Lubitsch, interpretada por Amparo Larrañaga y Jose Luis Gil. Me divertí mucho y tanto me gustó la historia (hasta entonces desconocida por mí) que me planteé ver el largometraje original un día no muy lejano.
Y ayer fue el día.
"Ser o no ser" fue dirigida por Ernst Lubitsch e interpretada por unos magníficos Carole Lombard y Jack Benny (sin desmerecer a los estupendos secundarios). Nominada al Oscar por su banda sonora, fue estrenada en 1942 en medio de una gran inestabilidad política, suponiendo por ello un asombroso ejercicio de valentía.

Dos meses antes del estreno, Lombard fallecía junto a su madre en un accidente aéreo tras una actuación para los soldados norteamericanos que se iban al frente.

Varsovia acaba de ser invadida por lo nazis mientras una compañía de teatro (encabezada por el matrimonio Tura) se ve inmersa, sin buscarlo, en una compleja trama de espionaje. Todos ellos tendrán que dar lo mejor de sí mismos en una interpretación en la que les irá la vida y de la que dependerá el futuro de la resistencia polaca.

Los constantes saltos entre la realidad y la ficción teatral mantienen un ritmo vertiginoso a lo largo de todo el metraje, dando paso a personajes como el coronel Ehrhardt o el mismísimo Adolf Hitler, quienes no salen muy bien parados por el guión, que nos ofrece una imagen bufonesca de ambos. A caballo entre película-denuncia y vodevil, esta comedia ácida es del todo políticamente incorrecta para su época.

Ernst Lubitsch, judío-alemán, se trasladó a los EEUU en 1922, donde prosperó y donde, ya como supervisor de la Paramount, ofreció una oportunidad a artistas que huían del nazismo, como Billy Wilder y Otto Preminger. Se cuenta que Billy Wilder le profesaba tal admiración, que de la pared de su estudio colgaba un cartel que rezaba: "¿Cómo lo haría Lubitsch?".

A partir de una idea propia surge este guión magnífico, salpicado de inolvidables momentos y frases mordaces como éstas:

- "Podría molestar a Hitler"
- "¿Es que acaso estaría mal eso?"


Prof. Siletsky: "¿Sabe Vd. lo que significa el nazismo? Todo lo que intentamos hacer es crear un mundo feliz".
María Tura: "Y la gente que no quiere ser feliz no tiene sitio en este mundo feliz... Vaya!!"


Teniente Stanislav: -"Puedo soltar 3 toneladas de dinamita en 2 minutos. ¿Quiere Vd. ver mi avión?"
(Como el mismo Lubitsch afirmaba: "Yo dejo a la audiencia usar su imaginación. ¿Qué puedo hacer si se malinterpretan mis sugerencias?")
Un guión que al mismo tiempo rinde homenaje al mundo del teatro, donde el director se inició en el mundo de la interpretación.
Las confusiones y malentendidos dan pie a magníficas escenas y las constantes repeticiones de algunos gags incrementan el tono jocoso y burlón, que ataca sin piedad a la Alemania de la Gestapo, ridiculizándola a lo largo de todo el film.

Al parecer, la película estuvo prohibida en nuestro país por el régimen franquista y no debutó en el patio de butacas hasta los años 70.
Durante su preestreno en EEUU, en la secuencia en que el Coronel Ehrhardt da su opinión sobre la talla profesional de Josef Tura como actor y dice: "Nosotros estamos haciendo con Polonia lo que él ha hecho con Shakespeare", dicen que la sala enmudeció. Y que tras el pase cuando Lubitsch, en compañía del productor y un grupo de amigos (entre los que se encontraba Billy Wilder) fueron a intercambiar impresiones en un bar de copas, sólo su esposa se atrevió a sugerir que debían eliminar la frase. El resto del grupo estuvo de acuerdo. Pero Lubitsch se negó: "Me pareció que la única manera de que la gente oyera hablar de los sufrimientos de Polonia era hacer una comedia. El público sentiría compasión y admiración por las personas que todavía eran capaces de reir en medio de la tragedia".

Por cierto, respecto a la escena de los "dos Siletsky": magistral.
Una "comedia amable" sólo en apariencia. Y por lo que a mí respecta, un gran descubrimiento.

6 comentarios:

chema dijo...

interesante post, anele. casualmente he estado leyendo entre ayer y hoy diversos artículos en internet sobre los regímenes totalitarios. no sé hasta qué punto será verdad, pero dicen que franco tenía cierta afinidad por hitler y el nazismo, que tras la derrota de alemania en la segunda guerra mundial trató de disimular y hacer olvidar.

ridiculizar a hitler fue una propuesta original dada la seriedad y la pose intimidatoria por la que se le recuerda. y sobre todo fue una propuesta muy valiente, como bien dices, hacerlo en vida de hitler, cuando la segunda guerra mundial no había finalizado.

Inma dijo...

Con faldas y a lo loco y ahora Ser o no ser. Vas citando mis pelis clásicas imprescindibles. Te acabo la lista sin pensar mucho:

El bazar de las sorpresas
La octava mujer de Barbazul
La fiera de mi niña
La mujer del año
El hombre tranquilo
El despota
Historias de Filadelfia
La heredera
Brigadoon
Vacaciones en Roma

En fin mañana pasaré por aquí y veré las que decís vosotros y me moriré por no haberlas puesto yo misma jajaja

anele dijo...

Uf, Inma, es que ese tipo de listas son muy largas. Precisamente mis siguientes opciones son El Bazar y Un Ladrón en la alcoba. He leído muy buenas críticas de ambas y me apetece ver algo más de Lubitsch. Me encanta la Hepburn, así que coincido en Historias de Filadelfia (y La fiera de mi niña (aunque hace siglos que las vi). Vacaciones... sin comentarios (Audrey es especial). Y tengo pendiente desde hace años La Heredera.

Chema, no me sorprende lo que dices después de leer que aquí fue censurada.
Hubo varias películas que criticaron la figura de Hitler en vida; realmente fueron muy valientes.

Candela dijo...

Me estoy leyendo la biogradia de Joan Crawford y habla bastante de la Lombard.
Excelente pelicula, por cierto!!

Elphaba dijo...

Ser o no ser es una obra maestra imprescindible, y una comedia para troncharte de risa, y todo Lubitsch es genialidad.

Es una maravilla poder seguir descubriendo estas cosas, verdad?

Realmetne valiente además de divertidísima. El gran dictador también era una comedia bastante directa, y también tuvo sus problemillas. Genial por los cuatro costados también.

anele dijo...

Sí, Elphaba. Para mí ha sido todo un descubrimiento. Me encanta las sorpresas que me tienen reservadas a veces los clásicos.