ARRANCA LA PASARELA

Acaba de comenzar la "antes conocida como Pasarela Cibeles" (cuyo nombre actual es imposible de recordar sin bailar las palabras) plagada de nuevas propuestas para las fashion victims.

Las top models corren de acá para allá en el backstage, que bulle con una actividad frenética; es pura efervescencia. Tras la beauty session corren a por sus stilettos y su clutch para completar sus outfits y salir a la pasarela con paso firme desplegando todo su charm. Comienza un show en el que los couturiers han milimetrado hasta el último detalle (decorados, música,...).

Podemos depedirnos del LBD (little black dress) y de los triquinis porque ahora entran con fuerza los bandeaus, los tonos juicy y el print liberty, que nos cubrirá de flores de los pies a la cabeza.

Fruncidos con efecto tie-dye, pantalones baggy, en tamaño oversize o shorts con efecto shiny se codean con las faldas midi y los tuxedo-dresses.

Multitud de looks definirán la próxima temporada: desde el clásico working-girl al preppy , pasando por los seventies de inspiración Pucci o el minimal tipo Cèline.

Otro hit de la temporada será el total look white, que va de la mano del nude, cargados del romanticismo del boho-chic y del ad-lib. Incluso veremos resurgir el hand-made, como ya hizo Alexander McQueen en esta reciente vuelta de tuerca:

El desenfadado estilo arty que ya nos mostró hace meses Marni, el inconfundible estilo lady de Alma Aguilar, encajes, denim, chiffon, plisados y volantes deleitarán nuestras pupilas.

En el front-row las celebrities y las it-girls, encaramadas a sus peep-toes y luciendo el it-bag de turno que complementa su trendy outfit, toman nota de los nuevos must have y se preparan para, una vez terminado el desfile, disfrutar de las múltiples aftershow parties.

Madre mía, si Cervantes levantara la cabeza...