viernes, 15 de julio de 2011

PALACIO DE COMUNICACIONES

El magnífico edificio de Correos por fin podrá ser disfrutado por los ciudadanos. Tras un arduo y prolongado trabajo de rehabilitación por fin abrió sus puertas al visitante, que ha podido acceder de forma gratuita hasta julio.
Cerrará de nuevo sus puertas durante unos meses para organizar la que será su nueva función como centro cultural.

A lo largo de estas semanas, son muchos los que han acudido a sus visitas guiadas y contemplado la breve exposición fotográfica que recorre sus 100 años de historia, recorrido el interior del edificio y valorado de cerca su valor arquitectónico o incluso han ascendido al mirador de 70 m de altura que nos ofrece unas vistas de las que hasta ahora sólo habían podido disfrutar unos cuantos privilegiados. Doy fe del lujo que supone contemplar la sierra madrileña desde la mismísima plaza de la Cibeles (quién lo hubiera dicho).

A principios del siglo XX las autoridades locales deciden crear una nueva y faraónica sede de correos y telecomunicaciones y el lugar elegido será la Plaza de Castelar (conocida hasta 1900 como Plaza de Madrid), en unos terrenos que originalmente formaban parte de los Jardines del Buen Retiro.

Se presentan a concurso numerosos proyectos y finalmente será elegida la propuesta de Antonio Palacios y Joaquín Otamendi, que contempla la construcción de un edificio en estilo Renacimiento español y absolutamente funcional. Comienzan las obras el 12 de septiembre de 1907 pero no finalizarán hasta 12 años después, con la inauguración (el 23 de noviembre de 1919) del que desde entonces será conocido como la Catedral de las Comunicaciones. Posiblemente el apelativo se deba a León Trotski, de quien dicen que quedó tan impresionado ante la vista del mismo en su visita a la capital en los años 30, que lo denominó "Nuestra Señora de las Comunicaciones".


Fue, durante las primeras décadas del siglo, la casa de correos de mayor superficie entre las principales ciudades del mundo (sus 10.500 m cuadrados aventajan a los 10.000 del edificio de Chicago, el segundo más grande del mundo en la época).



El gran patio interior facilitaba el tránsito hacia los distintos servicios de telegrafía, correos y telefonía; las plantas superiores albergaban las oficinas de la dirección, la cartería y una sala de telégrafos que conectaba con la antena.





En la planta de calle podemos relajarnos leyendo la prensa del día o alguno de los libros de arte repartidos por las mesas:






4 comentarios:

Geno dijo...

Que edificio más bonito tanto por dentro como por fuera. Y otro maravilloso post para conocer otro edificio más de la arquitectura madrileña

chema dijo...

qué bien, anele, en esta ocasión, en tu magnífica serie de posts sobre los edificios emblemáticos de madrid, además de recordar la historia te haces eco de la actualidad.
me encanta ese edificio. y esta en uno de los lugares más elegantes de madrid: en cibeles, en el arco donde empieza el paseo del prado. por fuera es bonito, y por dentro aún más si cabe.
y es verdad, el parque del retiro se llama oficialmente parque o jardines 'del buen retiro'. en cualquiera de sus puertas se puede ver...

BLAS dijo...

Este es uno de mis edificios favoritos de Madrid. ME encanta desde siempre.
En mis últimos años viviendo en MAdrid, para ir a mi casa de entonces paseando desde el curro, debía pasar por su puerta y entré varias veces para usarlo como su original función de sede de correos.
Me hubiese gustado ver esa exposición.

Un besote, guapa!

jose santiago dijo...

lei por ahi que te gustan mucho las cosquillas? pueded ser? te gustaria compartir ese gusto o conversar sobre ellas? soy jose santiago de buenos aires
josemarmol2002@live.com.ar.
un beso